El consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Gonzalo Santonja, ha presentado la obra de restauración de la panera del castillo de Villagarcía de Campos, junto al alcalde de la localidad, César Herrero. La actuación ha consistido en la recuperación del volumen del edificio, reconstruyendo sus muros y cubierta. Parcialmente se ha efectuado una excavación arqueológica. La intervención ha servido para preservar el edificio, proteger los restos arqueológicos descubiertos y crear un espacio libre para actividades culturales.
Gonzalo Santonja ha resaltado que este proyecto es una oportunidad de crear valor y favorecer el desarrollo económico sostenible a nivel local a través del Patrimonio Cultural, como recurso intrínseco y no deslocalizable. Y ha agradecido al Ayuntamiento su participación, con la acometida de la escalera de acceso a la panera, la renovación de los tótems informativos y las actuaciones de difusión que vienen promoviendo en colaboración con la Diputación Provincial de Valladolid.
La Junta de Castilla y León viene trabajando con el Ayuntamiento de Villagarcía de Campos, la Diputación Provincial de Valladolid, la Universidad de Valladolid, la Asociación Amigos de la Historia de Villagarcía de Campos, el Arzobispado de Valladolid y la Compañía de Jesús para la valorización del patrimonio cultural de esta importante villa en el marco del proyecto QU1554 Juan de Austria. La Colegiata, los espacios verdes, la conducción de agua del siglo XVI, la iglesia parroquial y el castillo forman parte de la riqueza cultural y natural de Villagarcía de Campos.
Precisamente sobre el castillo, la Consejería de Cultura, Turismo y Deporte ha llevado a cabo desde 2014 una serie de actuaciones encaminadas a su puesta en valor y a incentivar la visita al mismo. Se ha acometido la limpieza de algunas zonas, la consolidación de muros y de la torre, la realización de estudios arqueológicos, la incorporación de medidas para hacer accesible el bien, la instalación de señales informativas que facilitan la comprensión del mismo y el acondicionamiento del interior, permitiendo el recorrido de forma didáctica y ordenada y aprovechando los espacios para la realización de pequeños eventos. Todo ello ha supuesto una inversión de 170.000 euros a los que hay que sumar los casi 250.000 euros de la restauración de la panera.
El consejero ha señalado la necesidad de reflexión y de búsqueda de nuevas fórmulas de gestión para el patrimonio cultural, para lo cual se debe considerar la responsabilidad de todos frente a la necesidad de cuidar los bienes desde una óptica moderna, de sostenibilidad en la intervención pública y de búsqueda de fórmulas de concertación institucional. En este sentido, ha agradecido a todas las entidades que vienen colaborando en los trabajos de adecuación del Castillo.