La Junta impulsa el IV Plan Director, que se aprobará en el primer trimestre de 2023 como documento estratégico en materia de cooperación internacional para la presente legislatura

El consejero de la Presidencia, Jesús Julio Carnero, ha presidido hoy el Pleno del Consejo de Cooperación al Desarrollo de Castilla y León celebrado en Medina de Rioseco (Valladolid).

En esta reunión han participado representantes de todas las consejerías, las organizaciones de desarrollo, organizaciones sindicales y empresariales, las universidades y las entidades locales implicadas en la materia en la Comunidad.

El consejero ha querido reconocer “la implicación y compromiso de los diferentes actores para destacar el importante papel de la cooperación descentralizada y de las entidades locales en la política de cooperación internacional y al mismo tiempo el propio compromiso de la Junta, consolidado a lo largo de casi treinta años, en su trabajo de concienciación de la sociedad y la lucha contra la pobreza en el mundo”.

Contenido y orientación del IV Plan Director

En esta sesión se ha sometido a informe el texto del IV Plan Director de Cooperación para el Desarrollo de Castilla y León 2023-2026, que será aprobado en el primer trimestre del próximo año y donde se fijan las principales líneas de actuación para los próximos cuatro años.

En este sentido Carnero ha puesto de manifiesto que “este anteproyecto ha sido elaborado por medio de un proceso participativo, donde se ha contado con la reflexión e implicación de los distintos agentes de cooperación para el desarrollo de Castilla y León, y ha pasado los tramites de participación ciudadana y de audiencia e información pública a través de la web de la Junta de Castilla y León”.

El IV Plan Director recoge los objetivos, principios orientadores, prioridades y modalidades de la cooperación en el marco temporal 2023-2026, y nace del consenso y la voluntad de avanzar en un compromiso común en favor del desarrollo humano, fomentando las fortalezas de la Comunidad en el marco estatal e internacional, fijando objetivos alcanzables y retos a medio y largo plazo, que mejorarán la calidad y los resultados de las intervenciones.

De este modo se puede destacar del texto del Plan su clara orientación a promover un desarrollo inclusivo y sostenible, dirigiéndose siempre a los colectivos más vulnerables de los países en vías de desarrollo, a atender las numerosas y crecientes crisis humanitarias, a promover la sensibilización y la solidaridad en nuestra sociedad, a fomentar la cooperación técnica como forma de intercambio de conocimientos y tecnologías y procurar la necesaria coordinación de actores.

A este respecto, Jesús Julio Carnero ha dejado claro que “este documento estratégico incluye algunas novedades que materializan el impulso que el Gobierno de Alfonso Fernández Mañueco ha decidido darle a la cooperación internacional en esta nueva legislatura”. Entre ellas están:

  1. Un programa de protección de personas defensoras de derechos humanos que incluye iniciativas vinculadas al apoyo, acompañamiento y protección de personas amenazadas por la defensa de los derechos en sus comunidades, que las ONGD habían reclamado en numerosas ocasiones y que finalmente ve la luz en esta legislatura.
  2. Un programa de apoyo a la cooperación universitaria que recoge tanto acciones formativas, como del impulso del voluntariado o la asistencia técnica, entre otras, que se llevará a cabo con las cuatro universidades públicas de Castilla y León.
  3. Un programa que invita a las empresas a involucrarse más como agente de cooperación internacional a través de su responsabilidad social empresarial, participando y contribuyendo a la consecución de los retos globales, convirtiéndose en `empresas con propósito´ o empresas solidarias. Desde la Junta de Castilla y León se va a impulsar y se dará apoyo y orientación a todas las empresas que quieran sumarse a esta iniciativa.
  4. Un programa de coordinación y complementariedad institucional entre la Administración Autonómica y las entidades locales que simplifique y haga más eficaz la cooperación pública en Castilla y León.
  5. Un programa de visibilidad y comunicación del trabajo que se realiza en el ámbito de la cooperación internacional, no sólo de la propia Junta de Castilla y León sino de todos los agentes implicados para que la ciudadanía conozca lo que se hace y cómo se hace, impulsando una nueva imagen en el exterior de la Cooperación de Castilla y León.

Por último, se ha presentado la memoria de actuaciones del presente año que incluye las intervenciones y acciones directas desarrolladas durante este complicado 2022 por la guerra en Ucrania o la sequía, en el que la cooperación internacional ha cambiado su dependencia orgánica volviendo a la consejería de la Presidencia.

Aumento presupuestario en Cooperación al Desarrollo para 2023

En la reunión del Consejo de Cooperación al Desarrollo se ha presentado también el proyecto de presupuestos para 2023 en esta materia, desglosando la dotación presupuestaria de todos estos programas.

En esas cuentas se ha reflejado un incremento de más de 1,2 millones euros para el próximo ejercicio que da cobertura a todas las nuevas iniciativas y que, además, amplía de forma notable la acción humanitaria, así como la modalidad de educación para la transformación social, alcanzando un total de 6 millones de euros destinados a Cooperación para el Desarrollo, un 25 % más que en 2022.

Castilla y León continuará con su respuesta rápida a los llamamientos internacionales de ayuda ante catástrofes destinando 525.000 euros en 2023 (eso supone un incremento de 320.000 euros, es decir un 156 % más de lo destinado en 2022); al apoyo a proyectos de inversión en infraestructuras y en capital humano para promover el desarrollo en países empobrecidos de destinarán más de 4,2 millones de euros (un 17 % más respecto al presupuesto de 2022); a proyectos de asistencia técnica en países en desarrollo están previstos 250.000 euros; y 825.000 euros irán dirigidos a la educación para la transformación social y la ciudadanía global con la finalidad de informar y favorecer el cambio de actitudes y valores de las personas (un 63,4 % más respecto del año 2022).