Más de 3.000 personas visitaron la V Feria de Carpintería ‘El Roble’ de Villafrechós, que se celebró del 9 al 11 de agosto. La muestra contó con cerca de 700 piezas entre muebles, decoración, antigüedades, objetos vintage y artículos de coleccionismo.

Una feria que no ha parado de crecer en estos años y que “recibe cada año a visitantes de lugares muy distintos”, reconoce el responsable y gerente de Carpintería ‘El Roble’, Aritx Martín. “Las Redes Sociales y trabajar en toda España con clientes, personas del sector y anticuarios permite que cada vez se conozca más esta iniciativa”, explica. Otro de los secretos del éxito es el patio que se levanta sobre un antiguo corral, que sin duda  “es un marco ideal para verano, en el que los visitantes pueden pasear observando los artículos entre el sonido de los pájaros y el agua”.

Además, “estamos satisfechos con las ventas, pero la feria sirve sobre todo para lograr más encargos”, apunta Martín. Hubo piezas de todo tipo pero “llamaron espacialmente la atención” un espejo que ‘El Roble’ realizó desde una ventana antigua, así como una pieza antigua, una estetera de artesanía toledana con remaches antiguos y soldada a fragua.