La cesta de Navidad se ha convertido, desde hace muchos años, en una de las tradiciones más significativas durante estas fechas. La mayoría de empresas deciden realizar este obsequio a sus empleados y clientes, como reconocimiento por el año vivido juntos y la relación entre ambas partes. Sin embargo, en muchas ocasiones también se antoja como un regalo ideal para familiares y amigos.

Las posibilidades a la hora de diseñar un regalo de este tipo han aumentado notablemente, si bien raramente faltan productos típicos de estas fechas como turrones, polvorones o vino. Y aunque hay cestas para todos los ‘gustos y colores’ lo que casi todos buscan es una combinación de productos de calidad, al mejor precio. Algo que sabe muy bien la Pecuaria Tierra de Campos, en Medina de Rioseco, una empresa que cuida cada detalle a la hora de su preparación.

Cuando llegamos a las instalaciones de ‘La Pecuaria’ Laura de Miguel, Itziar Martín y Miriam de la Fuente se encuentran preparando una de estas cestas. La gran vorágine a la hora de recibir pedidos y su elaboración «llega sobre todo a partir del puente de diciembre». Desde ese momento «todos los trabajadores de la empresa se vuelcan para realizar un trabajo en cadena» que tiene como resultado que estos manjares de Pascuas no falten en los banquetes y sobremesas de estos días. Y a pesar de que el trabajo es duro, «la mejor recompensa es saber que hemos llegado a tiempo».

La joya de la corona de estas navidades en la Pecuaria Tierra de Campos es un surtido de productos que se reparten en dos pisos de cesta de mimbre, con un valor de 250 euros. Un jamón, quesos, embutidos, vinos, conservas, bombones y otros dulces típicos componen esta cesta, que la cooperativa sortea entre todas aquellas personas que hayan hecho compras superiores a 50 euros coincidiendo con las últimas cifras de la Lotería del Niño.

Existen un sinfín de combinaciones, que se ajustan a todos los bolsillos y «el precio lo pone el cliente», apunta Miriam de la Fuente. Aunque sí hay un denominador común: «siempre nos piden productos de calidad». Algo que en esta casa no falta, porque «a diferencia de otros establecimientos que tienen prestablecidas sus cestas, nosotros las preparamos con los productos de la tienda». Además, «los precios son iguales tanto para socios como aquellos que no lo son».

Así que «desde solo 10 euros se pude regalar una cesta con una botella de vino y algo de turrón», reconoce Itziar Martín. A partir de ahí, «podemos preparar una de tamaño medio, por 30 o 40 euros, que puede incluir queso, vino, turrones, productos de la zona y dulces». En caso de apostar por los embutidos «el valor se eleva y llegaría hasta cerca de los 100 euros».

Tanto en las cestas como en los productos típicos de Navidad «apostamos por los productos locales», dice Laura de Miguel. Los quesos de Gamazo, la morcilla de Villada, los chorizos de Cañibano o los Selectos de Castilla se entremezclan con esas delicias que nunca faltan en las Pascuas de los más golosos. Junto a los polvorones y los mantecados de chocolate de El Toro –el dulce estrella entre su clientela- «hemos apostado por los turrones y bombones de La Trapa», añade Martín.

Y qué podemos decir de esos bizcochos de Tiedra que cada Navidad llegan a La Pecuria y que tanto gustan. Unos pastelitos que «la gente nos pide desde hace días y que tendremos a partir de diciembre», comenta  de Miguel. «Tal es su aceptación que contamos con unidades limitadas así que sobre todo trabajamos bajo encargo», añade.